La Carga Impositiva se halla en Constante Aumento, subtitula el diario El Siglo esta reseña periodística.
La reforma tributaria ha producido una merma en la capacidad de ahorro de los colombianos, sostuvo ayer el economista Camilo Pieschacón Velasco en conferenela dictada en el Centro de Estudios Colombianos, CEC.

El conferencista hizo un pormenorizado análisis del movimiento del ahorro en Colombia y destacó la manera como se ha ido acentuando la carga Impositiva en los últimos años. Señaló Pieschacón Velasco que la brecha del ahorro sigue siendo muy alta en América Latina...

Los estudios realizados en los diferentes países industriales y en desarrollo, han demostrado que la doble tributación sobre las sociedades de capital produce los siguientes efectos negativos sobre su estructura financiera y en el mercado de capitales:

• La doble tributacion induce a una mayor concentración de poder, tendencia que va en detrimento de los pequeños accionistas.
• La doble tributación encarece la financiacion de la sociedad anonima a través de la emisión de acciones y, por lo tanto, acentúa el deseo de recurrir a otras formas de finaciamiento, tales como el crédito otorgado por instituciones bancarias...

Al analizar la carga tributaria de los contribuyentes en una economía, es usual aplicar la metodología internacional de relacionar los ingresos fiscales con el producto nacional bruto o con el ingreso nacional. Los estudios efectuados en Colombia sobre el sistema impositivo o fiscal han utilizado la misma metodología para llegar a la conclusión de que la carga tributaria en Colombia no es exagerada y es inferior a la de los paises industriales y a la de muchas naciones en proceso de desarrollo.

No obstante, la utilización de esta metodología conduce a resultados completamente falsos y erróneos en el caso colombiano, al partir de la hipótesis de que la eficiencia administrativa del sector público colombiano es igual o equiparable a la del sector público en los paises industriales, lo cual no es cierto. Basta leer Ias secciones de correspondencia o cartas de los lectores en la prensa colombiana, para detectar claramente la deficiencia de nuestro aparato administrativoa todo nivel, o sea, la existencia abrumadora del llamado papeleo y caramelo. Pero en lo que nunca se ha reflexionado es que este papeleo y la pérdida de tiempo inherente a él, representa para la economía y, por ende para los contribuyentes un lucro cesante, es decir, un impuesto invisible, no consagrado en código tributario alguno...

La inflación merma la capacidad de ahorro y de reposición del capital fijo en el sector empresarial, o sea, se anota el mismo fenómeno de desplazamiento del ahorro empresarial hacia la esfera gubernamental.

La inflación se ha convertido para el sector empresarial en un grave problema, especialmente a causa de la legislación tributaria obsoleta sobre el sistema de depreciación establecido. Nuestra legislación al no aceptar la depreciación sobre el valor de adquisición real, sino sobre el costo histórico en libros, engendra un desplazamiento injusto de recursos privados hacia el sector público...

Es lógico que una tasa anual de inflación equivalente en los últimos años a un tipo de interés compuesto del 10 u 11%, desestimula, bajo este punto de vista, el hábito del ahorro y encamina los recursos hacia las llamadas inversiones reales que ofrezcan, por lo menos, una compensación al riesgo monetario. La inflación no solamente hace que el ahorrista reciba una especie de tasa negativa de interés...

Pero no solamente la inflación representa un factor negativo en la promoción de ahorros, sino la combinación de ella con el sistema impositivo de cualquier país. Sobre el particuiar y ante la actualidad del tema, cabria preguntarse si no es lógico que las tasas ímpositivas estén sujetas también a un reajuste monetario, sistema que podría funcionar haciendo que ellas fuesen decrecientes o deflactando y reajustando el valor neto de los impuestos a pagar, de acuerdo con el índice de costo de la vida...

El impuesto sobre la renta y patrimonio está basado en Colombia en tasas progresivas, de tal modo que cuando la renta gravable aumenta, los impuestos no crecen proporcionalmente sino a una escala ascendente muy acentuada.

En economías con estabilidad monetaria, este sistema es justo y, siempre y cuando el gasto público sea bien manejado e invertido, el sistema de tasas progresivas representa un instrumento ideal de la política de redistribución del ingreso y el patrimonio nacional, dentro del marco de una política social activa...